25 de marzo de 2009

Memorias de una vida amorosa.

Imaginemos una sucesión de actos. Supongamos que esa secuencia es la vida entera. Ahora pongámosle una duración para no dudar de la mortalidad; algunos segundos alcanzan. Comprendemos así que el tiempo es finito pero indeterminado, que una vida es un momento recordado. Que vivir es recordar ese momento hasta el olvido.

Clive Wearing apenas puede retener en su mente algunos segundos de su vida, luego los olvida. No tiene recuerdos, no tiene pensamientos, cree jamás haber visto a nadie. Solo tiene dos cosas: el conocimiento musical que alguna vez adquirió, y su esposa, a quien no importa si la vio apenas unos minutos atrás, porque cada vez que la ve él cree que es la primera vez en años.




Para ver el video sin editar, click aquí.

2 comentarios:

Mariana Soffer dijo...

Es la misma historia que la de una historia de oliver sacks del libro que se llama "the man who mistook his wife for a hat", la diferencia es que trata de un hombre que esta en una clinica.

Diego dijo...

Casi, Mariana. Pero no. Si no me equivovo esta ¨historia¨ es parte del nuevo libro de Sacks, aun sin edición en castellano (y que no veo la hora de que salga), que se llama Musicofilia.

El libro ¨El hombre que confundió a su mujer con un sombrero¨, admirable por cierto, contiene varios ensayos que pivotean en torno a capacidades y discapaciades asociadas con la memoria, entre otras cosas. Pero, el caso que da nombre al libro es bien distinto al que posteé. Por otro lado, mi pretención dista a lot de ser una especie de cita a Sacks. Nada más aburrido que decir lo que otros han dicho, y más aun, mejor.