17 de marzo de 2015

Todos los puentes.

Hay una materia secreta en la facultad de ingeniería que enseña a los futuros ingenieros a construir puentes infalibles para aquellos que desean saltar de ellos y así quitarse la vida. Va de nuevo: hay una materia especialmente pensada para quienes deban construir puentes y tengan, en esa labor, la responsabilidad de darle las características necesarias para que, el aspirante a suicida, pueda dar con su cometido. Otra vez: la materia de la facultad de ingeniería que explicita las técnicas apropiadas y los conocimientos necesarios para construir un puente apto para suicidas es secreta y obligatoria. De nuevo: todos los ingenieros que realizan puentes tienen un objetivo secreto, pero que responde al mismo deber hipocrático con que los médicos fundan la nobleza de su oficio, en este caso los ingenieros deberán crear a todo puente con las propiedades necesarias para que los interesados en el suicido puedan acometer con su tarea sin inconvenientes. Los conocimientos y saberes necesarios para que cada puente sea perfecto a estos efectos, son dictados en una materia secreta. Una vez más: te amo con locura.

1 comentario:

Principito dijo...

Intereante, desconcertante final.